La transcreación publicitaria es clave en una estrategia de marketing internacional. En el ámbito de la creación de los contenidos publicitarios, se utiliza una serie de recursos, como frases hechas, dobles sentidos y alusiones a tradiciones o a algún aspecto de la cultura local, que pierde todo el sentido si se traduce de forma literal. Para proteger la marca y todo lo que significa, es necesario contar con un buen servicio de transcreación.
La marca de un producto o servicio aporta un valor que influye en la decisión de elección y compra de los consumidores. Cuando el comprador escoge un artículo u opta por una empresa determinada en función de la marca es porque se identifica con ella y establece una relación de familiaridad, respeto y confianza.
La marca satisface la experiencia de compra del consumidor e incrementa la cotización del producto o servicio confiriéndole una identidad que el cliente está dispuesto a pagar. Dicho de otro modo, el usuario no solo adquiere el uso o provecho de un bien, sino que compra una marca.
La interacción de la marca con el cliente construye una reputación que, lejos de basarse solo en la calidad del producto o servicio, se establece gracias a la percepción del usuario y su consideración acerca de los valores que le asocia.
Lograr una buena reputación de marca no es fácil y, por ello, es necesario protegerla en todas aquellas acciones que se llevan a cabo. En la internacionalización de la marca es imprescindible hacer llegar a cada público la esencia y personalidad originales, aunque perfectamente integrada en el mercado de destino a través de su idioma y de los rasgos característicos de su carácter y cultura. La transcreación publicitaria es el medio para lograrlo.
¿Conoces el refrán español que dice «A dónde fueres, haz lo que vieres»? Una traducción literal al inglés sería: «Wherever you go do what you see». Sin embargo, un transcreador nunca lo trasladaría así, sino que haría uso de este refrán inglés: «When in Rome, do as the Romans do», que es totalmente distinto, aunque tiene el mismo significado. Este es un ejemplo claro de la diferencia entre traducir y transcrear.
En el proceso de internacionalización de una empresa, una transcreación publicitaria de calidad es fundamental para preservar la reputación de la marca en el proceso de traducción de todas las acciones comunicativas de la marca.
Te damos algunos consejos a tener en cuenta cuando se aborde un proceso de transcreación de contenidos:
La transcreación publicitaria en manos de los mejores profesionales trabajando con los recursos adecuados, como los de Linguaserve, son la mejor baza para proteger tu marca.