La industria cosmética es uno de los sectores con mayor proyección internacional. Hombres y mujeres de todo el mundo son persuadidos por productos y servicios que cuidan y embellecen, y el mensaje con el que se les invita a usarlos es la llave para que decidan cuál prefieren comprar.
El comercio electrónico ofrece a todos ellos una cantidad ingente de posibilidades donde escoger. Ante esto, la traducción profesional para la industria cosmética es un factor fundamental, no solo para que se entiendan perfectamente las características, ingredientes y forma de uso de cada producto de manera clara, sino también atractiva. Si hay un sector que aúna la ética científica y la estética de la belleza este es, sin duda, el de la cosmética.
El término cosmética procede de la palabra griega κόσμος (kosmos = orden, limpieza, belleza), concretamente del verbo derivado κοσμέω (poner en orden, ornamentar, arreglar), junto al sufijo -ικος (-ico = relacionado a). En este sentido, los servicios y productos de la industria cosmética nos proporcionan la higiene y armonía de la belleza.
Pero la belleza o el concepto de esta no es igual en todas partes, y cuando una empresa decide internacionalizar sus productos debe tenerlo muy en cuenta. La traducción profesional en la industria cosmética se convierte en la herramienta clave para ello. El mensaje, el claim y la publicidad en cualquier canal o formato deben adaptarse a la lengua y cultura de cada lugar.
El traductor especializado tiene que conocer a fondo la cultura de los consumidores para los que traduce, sus costumbres y gustos, así como aquellas ideas y términos que se deben evitar.
La parte técnica no se queda atrás. El traductor también debe realizar contenidos más propios de la traducción científica y adoptar el tono informativo adecuado para que el consumidor entienda toda la información.
La traducción profesional en el sector de la cosmética demanda al traductor una gran creatividad, que tiene que casar con una fidelidad a la línea corporativa de la marca, los conocimientos de la terminología técnica en la lengua de origen y de destino y el ajuste a la normativa internacional que regula la comercialización de estos productos.
Lo cierto es que los consumidores se sienten atraídos por la promesa del marketing, pero también quieren conocer los ingredientes, la forma de utilización y los efectos de los cosméticos.
La gama de los contenidos a traducir es muy amplia y compete tanto a los clientes finales como al cumplimiento de la legislación exigida por las autoridades sanitarias. Son entre otros:
El lanzamiento de un producto cosmético a un nuevo mercado conlleva un esfuerzo importante de recursos económicos y humanos. La traducción profesional para la industria cosmética comporta importantes beneficios para estas empresas. Te contamos algunos de los que más pueden interesarte si estás especializado en este sector:
En Linguaserve, contamos con un equipo de traductores especializados y con las soluciones tecnológicas más avanzadas para que tu proyecto de internacionalización llegue hasta donde tú quieras.